COVID19: Recomendaciones para el aislamiento social con niñas, niños y adolescentes

#MeQuedoEnCasa

Cuidar la salud mental es tan importante como la salud física.

• Recordemosles que esta es una situación TRANSITORIA, y que luego retornaremos a nuestras vidas habituales
• Demos lugar a que expresen los sentimientos que genera esta situación. Escuchemos sus inquietudes y respondamos sus preguntas.
• Ayudémosles a comprender en forma clara la información que reciben. Transmitamos seguridad, con información precisa de fuentes confiables. 
• Compartamos juegos y actividades lúdicas y también dejemos que se organicen con sus propuestas.
• Apoyemosles en sus tareas escolares.
• Facilitemos que puedan mantener sus vínculos habituales a través de la tecnología.
• Aprendamos a cuidarnos y cuidar a los demás con prácticas saludables como lavado de manos, toser en el codo, limpiar los espacios.

Recomendaciones para la acción

• Reconocer el trabajo esencial que realizan los trabajadores y las trabajadoras de la infancia y adolescencia. Brindar recursos económicos extraordinarios para enfrentar la pandemia. Protegerlos/as para que realicen su trabajo con estrictas medidas de seguridad e higiene.
• Proteger y priorizar la salud de los NNA y los trabajadores. Garantizar insumos de higiene y medicación necesaria. Garantizar el acceso a la salud. Capacitar a los NNA y trabajadores/as sobre medidas de seguridad e higiene frente a la pandemia.
• Elaborar planes de manejo de la emergencia para el cuidado de los NNA en los dispositivos de cuidado residencial. Incluir prevención y protocolos de actuación en caso de contagio dentro de la institución.
• Sostener y reforzar el principio de la corresponsabilidad en el cuidado del sistema de protección para evitar la responsabilización exclusiva y excluyente de los dispositivos de cuidado institucional por la situación de NNA.
• Prevenir la expansión, financiamiento o construcción de nuevas instituciones para alojar NNA.
• Brindar recursos para mejorar la infraestructura y equipamiento de los dispositivos institucionales ya existentes para realizar la cuarentena en las mejores condiciones de habitabilidad.
• Garantizar espacios de privacidad para NNA y equipamiento tecnológico-digital.
• Apoyar económica y emocionalmente a las familias más vulnerables a fin de evitar la institucionalización.
• No hacer un uso excesivo de la fuerza o de medidas de aislamiento y no excederse de lo previsto por las autoridades gubernamentales para frenar la expansión del COVID-19. Por ejemplo, la detención discrecional e indiscriminada de NNA en la vía pública y su encierro por la fuerza en instituciones.
• Preservar las relaciones familiares y comunitarias de los NNA institucionalizados.
• Garantizar medios seguros entre NNA y sus familiares para mantener el vínculo (a través de llamadas telefónicas o reuniones virtuales, por ejemplo). Modificar las
  prácticas institucionales para lograr favorecer la comunicación de los NNA con su entorno. El aislamiento no implica la suspensión de los vínculos familiares y comunitarios.
• Fortalecer las políticas públicas de desinstitucionalización ya existentes, como el Programa de Acompañamiento para el Egreso de Jóvenes Sin Cuidados Parentales (PAE), las casas de pre egreso y las familias de acogimiento; a la vez que evitar la expulsión de NNA de instituciones. Dar seguimiento especial a egresos de NNA de instituciones que se den en el marco de la pandemia para asegurar el interés superior del/a niño/a.
• Brindar apoyo psicosocial a NNA y trabajadores. Brindar información oficial a NNA y evitar la des/sobre información. Entender que el aislamiento puede generar situaciones de estrés y ansiedad tanto para los NNA como las/os trabajadores.
• Generar espacios de reflexión, escucha y apoyo. Sostener los espacios terapéuticos y de salud mental de manera virtual y no interrumpirlos por el aislamiento.
• No dejar a las/os trabajadores/as solas/os frente a la pandemia. Generar espacios cercanos de supervisión, acompañamiento y orientación de equipos institucionales a cargo del cuidado frente a COVID-19 para atender emergentes y desafíos profesionales e institucionales.
• Fortalecer la generación de redes externas de cuidado entre pares en tanto factores de protección y de denuncia segura ante situaciones de violencia, maltrato o negligencia que se puedan generar en contextos de aislamiento.
• Realizar una sensibilización de agentes institucionales (trabajadores del sistema de promoción y protección de NNA, trabajadores de la salud, docentes, etc.) y de la
  comunidad en general, para reforzar que los NNA estén aislados, pero no solos y que hay que denunciar si alguien es testigo de situaciones de vulneración de derechos, para evitar que aumente la violencia y los abusos durante la pandemia tanto a nivel familiar como institucional. Es una obligación de todos denunciar.
• Realizar estudios rápidos para evaluar la situación y el impacto del COVID-19 en NNA sin cuidados parentales o en riesgo de perderlos, de manera de detectar principales inconvenientes que enfrenta la población en los contextos locales específicos para poder cumplir con el aislamiento social requerido y los principales
  problemas que emergen a nivel institucional y de las familias en los contextos específicos por el cumplimiento de la cuarentena; y así poder destinar de manera efectiva y eficiente los recursos del Estado.