¿Cómo se vive la diversidad sexual y de géneros en el sistema de cuidados alternativos?

“No puedo pensar en otra población de jóvenes que haya sido más maltratada por sus familias y por los sistemas de bienestar infantil diseñados para cuidarlos, que los jóvenes LGBTQ”. Con esa certeza comenzó la exposición de Gerald Mallon sobre “Géneros, diversidad y cuidados alternativos de niños, niñas y adolescentes”. Lo escuchaba un nutrido auditorio compuesto de estudiantes, jóvenes y diferentes profesionales con trabajo anclado en organismos de promoción y protección de derechos, como servicios locales y zonales, defensorías, hospitales, escuelas y hogares convivenciales con mucho interés en repensar las prácticas teniendo en cuenta las subjetividades LGBTTTIQ+. 

La actividad fue organizada y convocada por DONCEL junto al Equipo de investigación “Burocracias, parentesco, derechos e infancia” del Programa de Antropología Política y Jurídica, Sección Antropología Social, Instituto de Ciencias Antropológicas (UBA). Se realizó el martes 16 de julio en la Facultad de Filosofía y Letras y así se abrió un tema que es emergente en las instituciones de cuidados alternativos y, al mismo tiempo, se mantiene silenciado y tabú. 

 

Carla Villalta, investigadora de CONICET/UBA, dio la bienvenida a la charla y referenció la importancia de que la academia articule sus conocimientos con los de las personas y organizaciones que llevan adelante las prácticas.

 

Mariana Incarnato, directora ejecutiva de DONCEL, señaló: “los géneros siempre están ligados a las relaciones de poder. Así hay que pensarlos en su intersección con los cuidados alternativos que vienen a restituir derechos a niñxs”. La directora de DONCEL consultó a la audiencia por la formación en temas de género que reciben las personas con responsabilidad de cuidado de niñas, niños y adolescentes y se evidenció una falta que ya no puede ser justificada en estos tiempos. También planteó que el desconocimiento sobre la temática, la ideología y los prejuicios individuales no habilitan la violación de los derechos plasmados en la legislación nacional y los tratados internacionales (CDN, Convención de Belem do Para, Ley de identidad de género, Ley de educación sexual, etc.).

 

Mallon es profesor, investigador y decano asociado de la Escuela de Trabajo Social Silberman en el Hunter College de la ciudad de Nueva York.Durante más de 40 años, ha sido defensor de los derechos de niños, niñas y adolescentes. Es editor principal de la revista profesional Child Welfare y ha sido Director del Centro Nacional de Excelencia en Bienestar Infantil (NCCWE). Durante la charla relató los cambios a lo largo de las décadas en las experiencia de sexualidad adolescente en el sistema de cuidados norteamericano. 

 

A pesar de los avances, ser joven LGBTQ+ aún constituye un riesgo en ese contexto. Según Mallon, la problemática de vivienda es un factor que pone en riesgo a jóvenes LGBTIQ+ y hay una incidencia muy alta de suicidios entre esta población joven. Por eso, enfatizó que “se necesita desarrollar políticas específicas y guías de buenas prácticas para las instituciones de protección y de cuidados alternativos”. Entre las herramientas para una práctica en clave de derechos, Mallon enumeró la importancia del desarrollo de políticas escritas sobre cómo involucrar a los jóvenes LGBTQ, la formación y capacitación en servicio de los y las personas e instituciones cuidadoras, la generación de espacios de consulta de casos clínicos y la supervisión permanente para apoyar la formación y la práctica.

 

En el momento de intercambio con las personas presentes se compartieron experiencias de acompañamiento a jóvenes LGBTIQ+, se hizo hincapié en las prácticas ancladas en territorios, en las discriminaciones sociales y la violencia de ciertas normas institucionales, como la separación por sexo y edad en los hogares convivenciales. También se aclararon dudas sobre las denominaciones y sus sentidos de acuerdo a cada contextos y se reflexionó acerca de las formas de abordaje de la sexualidad con población adolescente, desde el enfoque de la educación sexual integral. 

 

El espacio habilitó la posibilidad de enunciar muchas preguntas acalladas. ¿Cómo acompañar las niñeces y adolescencias diversas, disidentes, que crecen por fuera de los estándares de los roles de género tradicionales? ¿Qué ecos permean las instituciones de cuidado sobre la revolución de género que protagonizan las nuevas generaciones? ¿Está prohibido el sexo entre adolescentes que viven en hogares convivenciales? ¿Cómo hablar de sexualidad, derechos y cuidados con los niños, las niñas y adolescentes que viven separados de sus familias? ¿Qué maltratos reciben las personas gays, lesbianas, trans, no binaries, agéneros y otras disidencias en los dispositivos de cuidado alternativo? Las respuestas se están construyendo e inventando colectivamente en las prácticas territoriales cotidianas. 

Fotos: Melina Trajtenberg.